El operador industrial de calderas debe conocer los diferentes parámetros relativos al proceso de la combustión: El poder calorífico, es un parámetro que determina el número de unidades de calor que se liberan por unidad de masa, correspondiente a los combustibles líquidos, sólidos y combustibles gaseosos donde se hace una referencia al volumen del gas.
Para ello dichos combustibles se queman en un calorímetro en unas condiciones previamente establecidas. El calorímetro es el aparato que determina a la cantidad de poder calorífico de un combustible.
A la producción de vapor a unas temperaturas por encima de la temperatura de saturación, se le denomina sobrecalentamiento. El sobrecalentador en la caldera industrial se define como un elemento en el cual por intercambio calorífico, se genera un aumento en la temperatura del vapor saturado que procede de la caldera.
El distribuidor o colector de vapor es la pieza clave en el circuito de vapor de cualquier caldera de vapor industrial. Por eso su diseño debe ser lo más ajustado posible al proceso al que abastece y optimizado para que sea lo más eficiente posible, evitando las pérdidas de calor. Desde sus ramificaciones se suministra el vapor a la presión adecuada para cada necesidad industrial.
El distribuidor está formado por las tubuladuras necesarias según los lugares de aplicación previstos de cada caudal de vapor.
La combustión en el horno produce dióxido de carbono, que es más pesado que el aire, por lo que se depositará. El carbono se quema a alta temperatura y sufrirá una reacción de reducción con dióxido de carbono para producir CO.
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Los cambios de estado en las calderas industriales son fundamentales, la materia se encuentra en la naturaleza en tres estados físicos: sólido, líquido y gaseoso dependiendo de la energía intermolecular que posea dicha materia.
En el estado sólido, las fuerzas intermoleculares que producen la cohesión son más fuertes que la energía del cuerpo a temperatura ambiente, de esta manera se puede garantizar tanto la forma como el volumen.
Aunque la caldera de gas tiene menos espacio de almacenamiento de combustible, se instalan y transportan más gasoductos, por lo que se deben tomar las medidas de seguridad correspondientes. Por lo tanto, actualizar la sala de calderas es uno de los aspectos importantes en cómo cambiar la caldera de carbón a una caldera de gas natural:
El economizador de caldera de carbón, como su nombre lo indica, es un dispositivo de caldera para ahorrar energía. La estructura del economizador de caldera de carbón se compone principalmente de un marco de acero inoxidable 304 y tubos con aletas en espiral de acero inoxidable, todos los cuales están dispuestos en un cierto orden.
Según la potencia, el tamaño y el precio de la caldera, el economizador de caldera adopta diferentes materiales, como acero inoxidable y acero ND. Según el medio, el economizador de caldera de carbón se divide principalmente en economizador de caldera de carbón con recuperación de calor residual de agua caliente de gas de combustión, economizador de caldera de carbón con recuperación de calor residual de aceite de conducción de calor de gas de combustión y economizador de caldera de carbón con intercambio de calor aire-gases de combustión.
La capacidad o la potencia de calderas puede expresarse en HP, kg/hora y kcalorías/hora. Cuando hablamos de calderas para centrales, la potencia de caldera es tan grande que hablaríamos de megawatios de electricidad. Hoy en día la potencia de caldera en las calderas grandes está establecida en kg/hora de vapor, kcal/hora o megavatios de potencia producida.
Así podremos establecer la siguiente equivalencia cuando hablamos de la potencia de calderas: Un caballo de caldera(HP de caldera) se define como la evaporación en términos de vapor saturado seco de 15.65 kg/hora a temperatura de 100 C, además es equivalente a 8.435,7 kcal/hora y se si hablamos de superficie de calefacción toma normalmente una superficie de calefacción de caldera de 0,92 metros cuadrados.
