El proceso de reemplazar las calderas industriales de gas con calderas industriales de biomasa, como los bloques de leña, implica varios pasos, que se describen a continuación:
Evaluar la viabilidad: antes de reemplazar las calderas de gas por calderas de biomasa, es importante evaluar la viabilidad del proyecto. Esto puede incluir la evaluación del suministro de combustible, la capacidad de las calderas y la inversión financiera necesaria.
1.Identifica a un proveedor confiable
2.Asegúrate de cumplir con las regulaciones y normas de importación
3.Negocia los términos y condiciones con el proveedor
4.Realizar una inspección previa al envío de la caldera de biomasa en la fábrica del proveedor para garantizar que cumpla con los estándares de calidad y seguridad requeridos.
5.Organiza el transporte de la caldera de biomasa desde China hasta tu destino final y verifica que la caldera llegue en buen estado.
Como fuente de energía de biomasa común, la madera se puede usar naturalmente como combustible para calderas, pero por un lado, depende de las características del combustible de la madera, como la humedad, el poder calorífico y las cenizas. Por otro lado, depende de si los parámetros de diseño de la caldera pueden cumplir con las características del combustible. De lo contrario, habrá problemas como combustión insuficiente y baja eficiencia térmica, lo que conducirá a graves accidentes de seguridad relacionados con el colapso del arco de la caldera.
Si la evaporación nominal es de 10ton/hr o menos, el valor objetivo de la eficiencia térmica de la caldera de pellets de biomasa es del 88 % y el valor límite es del 83 %.Si la evaporación nominal es superior a 10ton/hr, el valor objetivo de la eficiencia térmica. La eficiencia de la caldera de pellets de biomasa es del 91% y el valor límite es del 86%.
Dado que la sala de calderas es un edificio con cierto riesgo de explosión, es extremadamente dañino para el entorno, por lo que para la sala de calderas de nueva construcción, en principio debería ser un edificio independiente
La biomasa es la única fuente de energía que aporta un balance de CO 2 positivo, siempre que su obtención se realice de una forma sostenible, de forma que su obtención se haga más lentamente que la capacidad de la Tierra para regenerarse. Así, la materia orgánica es capaz de retener durante su crecimiento más CO 2 del que libera en su combustión.
La biomasa ha sido historicamente la principal fuente de energía de los humanos hasta la llegada de los combustibles fósiles, y hoy en día, gracias a los avances tecnológicos, se ha posicionado como una alternativa a estos combustibles fósiles.
En la actualidad, la aplicación más rentable que presenta esta fuente de energía es su utilización para fines térmicos en viviendas.
Natural: Producida sin la acción del hombre. Leña, excrementos…
Residual: Producida con la acción del hombre. Residuos de la industria agroalimentaria o madera…
Producida: Cultivos producidos únicamente con este fin. Girasol, maíz…
La biomasa es un residuo orgánico de materiales procedentes de seres vivos, obtenido de manera natural o procedente de transformaciones artificiales en algunos casos. Su producción se realiza en un ciclo periódico con balance de emisiones neutro.
La generación de energía térmica con biomasa se realiza a través de un proceso de combustión. La biomasa se quema con un alto porcentaje de aire a temperaturas de entre 600 – 1300ºC. En esta combustión se originan gases a muy alta temperatura de los que se aprovecha su calor.