Introducción: La inspección de la caldera juega un papel importante en la seguridad del funcionamiento de la caldera. La inspección externa de la caldera industrial generalmente es una vez al año y la inspección interna es una vez cada dos años. Además, una caldera debe aceptar una prueba hidráulica cada seis años. Las calderas que no se puedan inspeccionar internamente deben aceptar la prueba hidráulica cada tres años. La inspección interna de la caldera de servicios públicos y el ciclo de prueba hidráulica se pueden ajustar según el ciclo de revisión de la planta de energía.