Los depósitos de ceniza pueden formarse en las superficies de calentamiento por radiación, semirradiación y convección, tanto en la zona de altas como de bajas temperaturas. Pueden ser de flujo libre, unidos sueltos, unidos fuertemente o fusionados (escoria). De acuerdo con la composición química y mineralógica, se distinguen depósitos de aluminosilicatos, ligados alcalinos, sulfatos, fosfatos y depósitos con un alto contenido de hierro. Los depósitos se pueden ubicar en la parte delantera o trasera de los tubos de la superficie de calentamiento.