La parrilla móvil consiste en una serie de filas de parrilla de fundición superpuestas que, accionadas mediante cilindros hidráulicos, provocan un movimiento de vaivén que desplaza el combustible a lo largo de la parrilla hasta que éste queda consumido totalmente.
El accionamiento independiente de las parrillas mediante cilindros hidráulicos permite la sectorización del proceso en tres áreas independientes: secado, combustión y formación de ceniza.
De esta forma, puede regularse de manera independiente el aporte de aire de combustión en cada una de sus zonas. Una vez finalizada la combustión, la ceniza es evacuada al final de la parrilla.