Aunque suene extraño, comprar una caldera nueva puede ayudarlo a ahorrar dinero ahora y en el futuro. Los equipos viejos desperdician energía y no aprovechan al máximo el proceso de combustión. Se pueden hacer reparaciones, pero serán más costosas y necesarias con el tiempo. Instalar una caldera nueva significa que puede disfrutar de un equipo más eficiente, menos reparaciones y más ahorros.
El agua no cambia su masa al pasar de líquido a gas, por lo que para producir una tonelada de vapor por hora se necesita una tonelada de agua por hora, además de un margen de seguridad para garantizar que la caldera no se seque.
Se utilizan dos tipos principales de calderas para la generación de vapor: la caldera pirotubular (que es el tipo más común en las industrias lácteas) y la caldera acuotubular.
Para cumplir con los muchos desafíos y demandas que enfrentan las instalaciones de procesamiento de alimentos, la elección de una caldera de vapor puede marcar una diferencia significativa en la productividad y el resultado final de una empresa. Aquí hay algunos aspectos cruciales que debe buscar en una caldera de vapor confiable.
El calor de vapor juega un papel integral en la producción de alimentos de muchas maneras. Exploremos las aplicaciones más comunes y esenciales.
Esterilización y Desinfección
Reducción de riesgos microbiológicos
Cocinar, Curar y Secar
Calefacción de la instalación
Tomando como ejemplo una caldera de gas de 1000kg/hr con funcionamiento a plena carga. Si el poder calorífico del gas natural se calcula según 8.000 kcal por metro cúbico, según la diferencia de eficiencia de la caldera, se calcula que la caldera pirotubular de 1000kg/hr consume unos 72metros cúbicos de gas natural por hora.
Causas y tratamiento de la combustión insuficiente de la caldera de carbón
1, Volumen de aire insuficiente
2, Ventilación deficiente, suministro de oxígeno insuficiente, por lo que el carbón no se puede quemar por completo