1. Se debe reducirla temperatura del centro de la llama y controlar la temperatura de la salida del horno, que no exceda los 600 ℃.
2. Se puede utilizar soplado de hollín para reducir la ceniza flotante en el tubo del sobrecalentador y reducir la corrosión alcalina.
3. Se debe asegurar la calidad de descarga continua y periódica, y garantizar la calidad de vapor y agua.